"Hola, soy Alan Moore. Soy un escritor y brujo de Northampton.
Ninguno de mis éxitos comerciales fue planeado como tal. Todos eran personajes remotos que gustaban porque estaban bien escritos, no porque captaran alguna tendencia actual. No puedo enseñarte los caprichos de la opinión pública. No soy, a pesar de mi apariencia, un Nostradamus.
En cuanto a los consejos prácticos para una carrera de escritor, aquí está el mío: acepte cualquier trabajo que le ofrezcan que sea legal y moralmente tolerable, trate de hacer un trabajo lo mejor que pueda y aprenda del desastre resultante.
La escritura ha sido, y siempre será, nuestro principal medio para modificar la conciencia humana. Estás modificando la conciencia del lector y por lo tanto estás modificando la realidad del lector.
Escribir modificará la realidad y la conciencia de toda la especie e, inevitablemente, supondrá modificar la conciencia del propio escritor.
TODOS PUEDEN ESCRIBIR No dejes que el encanto y la historia mística te desanimen. Todo el mundo puede escribir. Quizás todo el mundo debería escribir. No es un llamado divino que sólo recae sobre unos pocos individuos especiales.
El instrumento más importante en el conjunto de herramientas de un escritor es el propio escritor. Es casi seguro que desarrollarse como escritor implicará desarrollarse como persona.
Será necesario adquirir un punto de vista moral debidamente reflexionado y tal vez una posición política igualmente bien razonada desde la cual observar y sopesar el mundo sobre el que se escribe.
No estoy diciendo que deban ser opiniones de izquierda, de derecha o (mi preferencia personal) anarquistas. Lo importante es tener una plataforma moral o política desde la cual mirar el mundo y, con suerte, comprenderlo." Alan Moore
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